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Hoy en el blog del Grupo MASMOVIL queremos darnos una vuelta por la España rural porque una de las realidades más relevantes por las que pasamos tiene que ver con la despoblación, realidad a la que se enfrentan los pueblos y localidades más pequeños del medio rural. En el momento actual, la conocida como España vaciada, también está viéndose afectada por la pandemia del coronavirus y sus devastadores efectos, necesitando más que nunca de la conexión a Internet a alta velocidad para mantener la comunicación con el resto del país así como su ya de por sí economía que se desarrolla en un entorno al que la digitalización no acaba de llegar, por el momento, al mismo nivel que en las ciudades.
En todos los trabajos desarrollados por el Grupo MASMOVIL para seguir ofreciendo la mejor conexión fija y móvil a los usuarios, tenemos siempre en cuenta las localidades menos pobladas. Una importante parte de la población se encuentra en el medio rural, donde, como comprobaremos, ahora más que nunca es importante mantener España conectada para seguir hacia adelante.
El uso de Internet se incrementa también en el medio rural
Desde que los efectos del COVID-19 empezaron a dejarse sentir, hemos oído hablar en muchas ocasiones sobre el incremento del uso de Internet, aunque la mayoría de los datos se refieren al consumo en las ciudades y grandes poblaciones de nuestro país. Sin embargo, los pequeños pueblos también deben estar representados y queremos mostrar por ello cómo también debe garantizarse en esas geografías descentralizadas una conexión estable, rápida y capaz de responder a las necesidades de sus habitantes.
Según los datos obtenidos por la asociación de operadoras locales, el incremento de la demanda en el uso de Internet durante el tiempo que dura ya el confinamiento asciende a un 40% en las pequeñas localidades. Este aumento de la demanda ha tenido un importante efecto en los clientes de MASMOVIL, y hemos tenido que trabajar a contrarreloj dar una respuesta óptima y sin incidencias.
Consumos fuera de la normalidad
Los efectos del trabajo en remoto y las actividades estudiantiles online también han hecho acto de presencia en la España rural, puesto que una gran parte de la población, que habitualmente reside entre semana en las grandes ciudades, ahora pasa todo el tiempo en sus localidades de origen desarrollando en estas sus labores habituales, profesionales o de aprendizaje.
Según los datos recogidos por el Grupo MASMOVIL, durante los días laborables el aumento del tráfico en España ha supuesto un incremento de hasta un 85%, mientras que en el fin de semana este incremento desciende solamente hasta un 50%. Estos incrementos porcentuales también se han visto reflejados las zonas rurales, donde la población, ahora sin posibilidad de desplazamiento, se encuentran en muchos casos lejos de familiares o amigos, y recurre a las nuevas tecnologías para mantener España conectada, con el firme propósito de no dejar que el coronavirus sea capaz de separarnos.
El entretenimiento, como en la ciudad, también es importante en las zonas rurales, tanto como: el confinamiento afecta por igual a todas las zonas de España y con independencia de la geografía, las plataformas en streaming son igual de populares, y es que sin las conexiones que permiten a mucho seguir su serie favorita o no perderse ningún estreno de cine, sería mucho más complicado sacar adelante el #QuedateEnCasa tanto tiempo y sobre todo lejos de las personas a las que más queremos.
Las conexiones a Internet en la España rural
Los datos de distribución poblacional de nuestro país dejan ver una clara muestra de la despoblación rural: si bien es cierto que el 90% del territorio español está definido como espacio rural, únicamente lo ocupa el 20% de la población. En el Grupo MASMOVIL no queremos dar la espalda a estos territorios y por ello el despliegue de fibra óptica en estas zonas tiene para nosotros tanta importancia como en los grandes núcleos de población.
Hemos conseguido superar la barrera de los 23 millones de hogares con fibra óptica, una cifra que sigue creciendo y que permite que cualquier rincón de España tenga a su disposición la mejor conexión a internet. Sabemos que las cifras son un valor importante, pero nuestra preocupación por el entorno rural va más allá de los números y es por eso por lo que continuamos llevando conexión FTTH a los hogares de todas las pequeñas localidades donde damos servicio: durante 2019, el Grupo MASMOVIL desplegó 477.000 nuevas unidades de fibra óptica en poblaciones de menos de 20.000 habitantes.
La tecnología FTTH, más conocida como fibra óptica, garantiza una conexión que de forma generalizada puede alcanzar los 600 megas. Un incremento de velocidad que ofrece muchas ventajas a los usuarios frente al clásico ADSL, que en el mejor escenario no supera los 30 megas.
En Grupo MASMOVIL somos muy conscientes de que sin el despliegue de la fibra óptica en el entorno rural sería prácticamente imposible llegar a ofrecer unas condiciones óptimas para afrontar el trabajo en remoto o la enseñanza online desde el hogar en estas zonas.
Aún hay mucho por hacer y conseguir
Las graves situaciones requieren de gran compromiso y esfuerzo de todos para todos, y este momento en que la pandemia del COVID-19 afecta a todo el planeta y mantenernos conectados es tan importante, en el Grupo MASMOVIL no queremos perder de vista las zonas rurales. Nuestro compromiso no distingue zonas ni geografía, estamos a disposición de todo el territorio fomentando acciones como la aceleradora MASventures, que da apoyo a los proyectos innovadores en el sector de las telecomunicaciones. Se trata de un modelo de innovación por medio del cual el Grupo MASMOVIL aumenta la relación con las “startups” que ofrecen nuevas soluciones y posibilidades. MASventures apoya proyectos con participación directa, posibilitando que nuevas ideas consigan el apoyo necesario.
Seguiremos trabajando para continuar llevando la mejor conexión también a las zonas despobladas de España, una parte de esencial nuestra geografía. La labor de los habitantes de esa España que se resiste a vaciarse, como son los agricultores y ganadores, constituye un valor esencial de nuestro modelo de sociedad, algo que ha quedado más patente que nunca ahora cuando los suyos son de los pocos sectores que en medio del parón y el confinamiento de todo el país continúan con su labor.
